martes, 22 de febrero de 2011

Terremoto en Nueva Zelanda



Al menos 65 personas ha muerto en Christchurch, en el sur de Nueva Zelanda, a causa de un devastador seísmo de 6,3 grados que sacudió esta ciudad, la segunda mayor del país, según ha confirmado el primer ministro neozelandés John Key. El terremoto ha dejado además numerosos heridos y graves daños en muchos edificios de la ciudad, incluida la catedral, parcialmente derruida tras la sacudida.

"Christchurh es una zona de desastre total", dijo Key al canal One News. "Estamos siendo testigos de uno de los días más negros de Nueva Zelanda", añadió el jefe del Gobierno poco después de llegar a la ciudad desde Wellington, la capital del país, para supervisar las tareas de rescate y de asistencia a los damnificados.

El temblor se produjo poco después del medio día a 5 kilómetros del centro de la ciudad y a 4 kilómetros de profundidad y fue seguido de una réplica de 4,5 grados, 15 minutos más tarde, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.

Según indicó en conferencia de prensa el director de Defensa Civil, John Hamilton, es probable que el numero de víctimas mortales aumente en las próximas horas a medida que avancen las labores de los equipos de rescate en los edificios derruidos o dañados.

El alcalde de la ciudad, Bob Parker, apuntó que se estima que al menos 200 personas continúan atrapadas en diferentes edificaciones de Christchurh, donde residen unas 400 personas. Entre los atrapados hay una veintena de estudiantes japoneses que habían viajado a la ciudad en un programa de intercambio y a los que el seísmo soreprendió en la ecuela. Dos de ellos han sido rescatados y enviados al hospital, mientras otros siete y una profesora han sido localizados entre escombros y estan a la espera de ser rescatados.

El temblor se produjo poco después del mediodía a 5 kilómetros del centro de la ciudad y a 4 kilómetros de profundidad y fue seguido de una réplica de 4,5 grados, 15 minutos más tarde, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.

"Lo que puedo ver desde aquí, en el centro de la ciudad, es que ha causado un daño considerable", indicó a la radio local el alcalde de Christchurch, Bob Parquer. Agregó que ha recibido informes, sin confirmar, de que también hay heridos graves.

En algunos tramos del pavimento de Chistchurch, ciudad en la que habitan unas 400.000 personas, el temblor causó socavones de hasta un metro de profundidad.

La Policía ha ordenado el cierre del aeropuerto y está evacuando el centro de la ciudad por temor a derrumbes.

El pasado septiembre, un seísmo de 7,2 grados golpeó Christchurch y causó decenas de heridos e importantes daños en infraestructuras públicas y edificios en el sur del país. Desde entonces, esta parte del país ha sufrido numerosos temblores, el último de 4,9 grados en la escala Richter justo después de Navidad.

Se desconoce si hay víctimas españolas
La Embajada de España en Nueva Zelanda desconoce si hay afectados entre la colonia de españoles de Christchurch, debido a que el fuerte seísmo ocurrido hoy en esta ciudad del sur del país ha averiado la red telefónica.

Lo que ha trascendido es que los tenistas españoles que disputan el Mundial de Veteranos en Nueva Zelanda se encuentran "a salvo y en perfecto estado de salud", según la Federación Española.

Los tres equipos que estaban disputando el Mundial en la localidad de Christchurch "están en estos momentos alojados en casas de particulares". El resto de equipos, que disputaban sus competiciones en distintas ciudades de Nueva Zelanda, apenas han notado los efectos del seísmo".

Los jugadores españoles son Begoña Eraña, Rosa Bielsa, Patricia Couder, Magda Gual, Joaquín 'Quino' Muñoz, Roberto Menéndez, Carlos Castellanos, Óscar Martínez, Carlos Costa Bou, Miquel Puigdevall, Pablo Semprún y Carlos Homedes.

Fuentes diplomáticas indicaron que estaban intentando, sin éxito, establecer contacto con los españoles registrados como residentes en Christchurch. En esta ciudad y alredeores se estima que residen entre 80 y 90 españoles, incluidos transeúntes con estancia temporal.

"Las líneas telefónicas están averiadas, llevamos horas tratando de contactar pero de momento no hemos conseguido hablar con ninguno", dijo un portavoz de la embajada española.

lunes, 21 de febrero de 2011

Tormenta solar "catastrófica"


Los expertos están, esta vez, todos de acuerdo. Una tormenta geomagnética como la que se produjo en la Tierra el pasado martes no es un fenómeno aislado. Y a pesar de que la que nos golpeó la semana pasada, hasta ahora la más potente del actual ciclo solar, no tuvo mayores consecuencias, en futuras ocasiones podríamos no tener tanta suerte. Un fenómeno similar, en efecto, tiene la potencia necesaria para acabar, de un solo golpe, con la sociedad tecnológica del mundo moderno.

Una tormenta solar lo suficientemente fuerte, en efecto, podría desestabilizar, incluso de forma catastrófica, una buena parte de nuestra tecnología. El mundo moderno, afirmaron el sábado diversos especialistas durante la reunión de la Sociedad Americana para el Avance de las Ciencias (AAAS), depende en exceso de la red de satélites. Navegación marítima y aérea, sincronización entre computadoras, redes de telecomunicaciones, sistemas GPS, aparatos electrónicos de todo tipo... Tecnologías, todas ellas, extremadamente vulnerables a los "cambios de tiempo" espacial.

Las consecuencias serían nefastas, en caso de una gran tormenta solar, para la red de satélites que orbitan la Tierra, muchos de los cuales quedarían literalmente "achicharrados", pero también para las centrales eléctricas de todo el mundo, cuyos transformadores quedarían inutilizados provocando cortes en el suministro de electricidad que podrían durar semanas, e incluso meses.

Esperando la gran tormenta
La tormenta del pasado martes es el principio de una situación que, según los científicos, sólo puede ir a peor. De hecho, apenas si estamos al comienzo del actual ciclo solar y se espera que la actividad del Astro Rey se vaya haciendo cada vez más intensa en los próximos once años.

"No es una cuestión de si sucederá - explica Jane Lubchenco, responsable de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos- sino de cuándo sucederá y de cómo de fuerte será. La última vez que tuvimos un máximo en en el ciclo solar, hace cerca de diez años, el mundo era un lugar muy diferente. Hoy los teléfonos móviles están por todas partes. Es cierto que antes también los había, pero no dependíamos de ellos para tantas cosas diferentes".

Para esta experta, "muchas de las cosas que damos por sentadas y garantizadas dependen hoy mucho más de la meteorología espacial que durante el último máximo solar". A pesar del riesgo, los expertos admiten que, en la actualidad, muy poco podemos hacer para predecir una tormenta solar potencialmente peligrosa. Lo que sí deberíamos hacer es "blindar" de alguna forma las redes y centrales eléctricas, haciendo algo que nos permita, en caso de alarma, apagarlas rápidamente en las zonas más sensibles hasta que pase el peligro.

«El problema es la dependencia sobre el GPS»"Por favor, que no cunda el pánico - dijo por su parte Stephan Lechner, director del Centro Conjunto de Investigación de la Comisión Europea - Sobreactuar sólo serviría para empeorar la situación". Para este experto, la raíz de la vulnerabilidad del mundo moderno radica en su dependencia de los sistemas de posicionamiento global, o GPS, sin los que ya no sería posible la navegación marítima y aérea, ni la sincronización de las redes informáticas y los equipos electrónicos.
"El GPS nos ha ayudado -aseguró Lechner el sábado- pero también nos creó una nueva dependencia" que se extiende desde el sector aeroespacial a la producción digital de radio y TV, a los servicios financieros y a las agencias gubernamentales. Sólo en Europa, afirmó, existen 200 operadores de telecomunicaciones y "ninguno de ellos está estandarizado".

Imposible de prevenir
Ante la actual imposibilidad de prevenir una tormenta solar capaz de provocar la catástrofe, los gobiernos del mundo deberían elaborar estrategias de cooperación que les permitieran compartir toda su información vital, anticipándose así a los daños locales que esa tormenta podría provocar. Por desgracia, y a pesar del despliegue actual de medios, seguimos sin saber cuándo esa tormenta devastadora podría llegar a producirse.

"Actualmente -afirmó por su parte Juha-Pekka Luntama, de la Agencia Espacial Europea- no podemos decir si habrá una gran tormenta en los próximos seis meses, pero sí podemos decir que se dan todas las condiciones para que esa tormenta se produzca".

El pasado martes, una gran erupción solar, la mayor detectada en los últimos cinco años, envió hacia la Tierra un enorme torrente de partículas de plasma cargadas a una velocidad de 900 km. por segundo. La erupción fue de la clase X, la más poderosa de la que es capaz el Sol, produjo espectaculares auroras y desestabilizó algunos sistemas de comunicaciones, pero sus efectos se limitaron casi exclusivamente a latitudes muy al norte de nuestro planeta.

"Se podría pensar - afirmó Luntama- que esta vez estábamos bien protegidos. Pero resulta que los campos magnéticos estaban alineados en paralelo, por eso no pasó demasiado. Si no hubiera sido así, las cosas habrían sido muy diferentes".

Wikileaks


WikiLeaks (del inglés leak, ‘fuga’, ‘goteo’, ‘filtración [de información]’) es una organización mediática internacional sin ánimo de lucro que publica a través de su sitio web informes anónimos y documentos filtrados con contenido sensible en materia de interés público, preservando el anonimato de sus fuentes. El lanzamiento del sitio se realizó en diciembre de 2006, su actividad comenzó en julio de 2007 y desde entonces su base de datos ha crecido constantemente hasta acumular 1,2 millones de documentos. Su creador fue Julian Assange. Está gestionado por The Sunshine Press.

La organización se ofrece a recibir filtraciones que desvelen comportamientos no éticos por parte de gobiernos, con énfasis en los países que considera tienen regímenes totalitarios, pero también de religiones y empresas de todo el mundo. Por el momento las actividades más destacadas de WikiLeaks se han centrado en la actividad exterior de los Estados Unidos, especialmente en relación con las guerras de Irak y de Afganistán.

WikiLeaks se describe a sí misma como una organización fundada internacionalmente por disidentes chinos, así como por periodistas, matemáticos, y tecnólogos de empresas start-up de los Estados Unidos, Taiwán, Europa, Australia, y Sudáfrica. Los creadores de WikiLeaks no han sido formalmente identificados. Uno de sus asesores, editor en jefe y actual director es el australiano Julian Assange. El portavoz, desde septiembre de 2010, es Kristinn Hrafnsson, después de la renuncia de Daniel Domscheit-Berg, quien planea fundar su propio portal de filtraciones. Ante la detención de Assange el 7 de diciembre de 2010, Kristinn Hrafnsson toma las riendas de la organización.

A pesar de su nombre, WikiLeaks no es un sitio wiki habitual, ya que realmente los lectores que no tienen los permisos adecuados no pueden cambiar su contenido. WikiLeaks usa una versión modificada del software de MediaWiki y su servidor principal está alojado en el ISP sueco PRQ. Para proteger el anonimato de sus informantes, WikiLeaks utiliza OpenSSL, Freenet, Tor y PGP.

Libia



Varias agencias informan de que algunos edificios gubernamentales de la capital libia han sido pasto de las llamas esta mañana y que las sedes de la televisión y la radio públicas han sido saqueadas y quemadas por una turbamulta enfurecida esta pasada madrugada. "La Casa del Pueblo (Parlamento) está en llamas; los bomberos tratan de apagar el fuego", ha explicado un testigo citado por Reuters. Al Yazira informa de que la sede central del Gobierno libio y el edificio que alberga el Ministerio de Justicia en Trípoli también han sido incendiados. Mientras, las fuerzas del orden se han retirado prácticamente de las calles de la capital, según relata Reuters, que asegura que una comisaría de un barrio del este de la capìtal ha sido asaltada y calcinada.

Mientras la revuelta en las calles se encona, las críticas contra la represión ejercida por el régimen van en aumento. Mohamed Bayou, que hasta hace un mes ejercía de portavoz del Gobierno, ha dicho que el empleo de la violencia para frenar la revuelta es una decisión equivocada. En un comunicado que pone de relieve las primeras divergencias dentro de la élite gobernante en Libia, Bayou ha reclamado a Saif al-Islam Gaddafi que abra un diálogo con la oposición. "Espero que cambie su discurso y reconozca la existencia de una oposición interna. Que abra un diálogo con ellos para lograr cambios en el sistema libio", ha explicado este ex responsable.

233 muertos

Al discurso del hijo de Gadafi le siguieron anoche tiros y muestras de descontento en Trípoli. La cadena BBC cita testigos en Trípoli que relatan duros enfrentamientos esta madrugada entre manifestantes antigobierno y simpatizantes del dictador. Las organizaciones de derechos humanos Human Rights Watch y Amnistía Internacional están actuando de portavoz de lo que ocurre en el país, bajo un régimen dictatorial desde hace 42 años. HRW maneja la única cifra con cierta vitola de oficialidad: 233 muertos y un millar de heridos.

Una revuelta contra Gadafi parecía imposible hace unos días. Más aún que esta alcanzara Trípoli, el feudo absoluto del general. Sin embargo, se extiende la impresión de que los jóvenes han comenzado a perder el miedo al régimen y han salido a la calle. La llamada plaza Verde se ha convertido en el centro de las manifestaciones. Un millar de personas se ha reunido allí y han sido disueltas a base de gases lacrimógenos.

El levantamiento continúa sobre todo en el este del país, y Gadafi sigue reprimiéndolas con fuego de mortero y ametralladoras. Las primeras imágenes que salen del país, vídeos caseros grabados por los propios manifestantes, muestran grupos armados persiguiendo a la gente y hombres cayendo por las balas. Ayer el descontento estalló en Musratha, (340.000 habitantes), la tercera ciudad después de Trípoli y de Bengasi (epicentro de la sublevación y segunda ciudad libia, con poco más de un millón de habitantes, en el noreste). También se contagió a una importante tribu, Werfella, en un país en el que Gadafi gobierna desde hace 42 años gracias a sutiles alianzas tribales.

En las últimas horas los manifestantes marcaron algunos puntos en Bengasi, el foco más rebelde. Ocuparon Quryna, el rotativo afín a Saif el-Islam, y se apoderaron de vehículos militares. Según todos los testimonios procedentes de los disidentes de Bengasi, la ciudad escapa ya al control de las fuerzas de seguridad. Los disidentes también han tomado tanques y grandes cantidades de armas y municiones del Ejército, según reconoció el hijo de Gadafi en el discurso. "Los criminales circulan incluso a bordo de blindados", dijo.

En las ciudades orientales Al Bayda, Darna y Ajdabiya, parte de las fuerzas de seguridad se han pasado al lado de los manifestantes. Los familiares de las víctimas mortales del miércoles y del jueves, pensaron que ellos también podían confraternizar con las fuerzas de seguridad. Su excesiva confianza propició la peor matanza que se ha producido en Bengasi, narra un vecino de la ciudad que pide no difundir su identidad. Tras el entierro colectivo, los familiares de los muertos acudieron, el viernes al caer la noche, a la sede central de la policía. "¡Nosotros y las fuerzas del orden somos el mismo pueblo!", gritaban.

Un oficial de las fuerzas de seguridad salió del edificio, recuerda el vecino, y les dijo que sí, que "eran el mismo pueblo". Invitó a entrar a los que estaban en primera fila y cerró las puertas. "Mataron a 23 hombres", asegura. "Los difuntos tienen heridas de bala en la cabeza y en el pecho".

Como sucedió en El Cairo, en la plaza Tahrir, en Bengasi hay un lugar de protesta permanente. Es la plaza situada ante los juzgados, al norte de la ciudad. Allí llegaron a concentrarse hasta 30.000 personas, según el vecino de citado, pese al temor de ser acribillados a balazos. Por la noche siempre permanece un retén.

Marruecos


Cinco cuerpos calcinados fueron hallados en una agencia bancaria de la ciudad de Alhucemas, tras un domingo de protestas, "Día de la Dignidad", desarrolladas en un territorio compuesto por 57 wilayas (provincias), casi todo el país, según el balance oficial hecho público hoy en rueda de prensa por el ministro del Interior marroquí, Taieb Cherkaoui, que muestra "la libertad de expresión" en el reino alauita.

Sin embargo, frente al balance oficial desde el Comité 20 de febrero, impulsor de las jornadas de protesta, se baraja una cifra de muertos más elevada, aún pendientse de confirmar región por región sus datos.

Las manifestaciones en solicitud de mayores cuotas de democracia se saldaron con 128 heridos, de los cuáles 115 pertenecen a las fuerzas de seguridad marroquíes que, durante la jornada de ayer, detuvieron a 120 manifestantes que fueron puestos a disposición judicial.

Los datos esgrimidos por el titular de Interior cuantifican en 37.000 personas las que se manifestaron en un territorio equivalente a 53 wilayas (provincias), lo que, en su opinión, muestra "la libertad de expresión en el país y el sentido democrático de la vida política".

En su mayoría, las manifestaciones, según sus datos, se desarrollaron de forma pacífica, "aunque se produjeron algunas desviaciones", dijo en alusión a distintos actos de barbarie pepetrados por "criminales". Hubo incendios y ataques a edificios privados, a 33 establecimientos públicos, 24 agencias bancarias, 50 comercios, 66 vehículos y 2 motos, dijo en su relación.

Las ciudades de Tánger, Tetuán, Marraquech, Larache, Guelmin y Sefrou registraron esos actos de barbarie y fue en Alhucemas donde se hallaron cinco cuerpos calcinados en una oficina bancaria. En Larache, según el ministro Cherkaoui, "unos vándalos tomaron la sede de aduanas, donde se apropiaron de alcohol y narcóticos que habían sido inacuatadas por las fuerzas del orden".

A las 18.30 estaba prevista la celebración de una concentración frente al Parlamento, pero aún se desconoce si finalmente se llevará a cabo por las represalias de las fuerzas del orden.